Nuestra historia

La infancia

Los dos nacimos en 1985, ambos en septiembre. Y los dos nacimos en el Materno Infantil de Málaga, pero uno pasó su infancia en el Valle, entre cabras y panes; y el otro en Fuengirola, rodeado de guiris. Mientras uno exploraba el campo, trepaba árboles y jugaba con renacuajos, el otro aprendía a nadar entre turistas y se entretenía con películas de Disney en VHS. Dos mundos distintos, pero con algo en común: la curiosidad y las ganas de descubrirlo todo.

Los años de instituto

Adolescencias separadas, con caminos que aún tardarían en cruzarse. Uno pasó esos años con los pelos de colores y dibujos en los márgenes de los cuadernos; el otro, conociendo a grandes amigxs. Ambos con ganas de conocer, de explorar y de encontrar su lugar en el mundo.

Y nos conocimos

La química nos unió (la carrera, queremos decir), y saltaron chispas (entre nosotros, no en el laboratorio). 

Y nos sentimos orgullosos, y comenzamos
a caminar juntos.

Estudiando, viajando y bailando juntos

La pareja la entendemos como compromiso, conocer cosas junto al otro, discutir los desacuerdos y celebrar los encuentros, ayudarnos en lo que podamos y sabernos siempre libres. 

Y si algo nos define a nivel individual, pero también como equipo, es que nunca hemos dejado de aprender y de explorar. Desde clases de arquitectura hasta ilustración, pasando por filosofía, química... ¡y hasta astrología!. Nos encanta viajar, perdernos en ciudades nuevas y volver con la maleta llena de historias y con las experiencias más memorables vividas con grandes amigxs. 

Y si hay música, bailamos. En festivales, en bodas ajenas y hasta en la cocina. Porque la vida, si es a nuestro ritmo, siempre suena mejor.